Buenos días chicas! Hoy os quiero hablar de un tema que considero que es el más importante a la hora de esculpir unas uñas de gel, ya sea con tips o con moldes.
Esta fase es crucial, ya que si no la realizamos correctamente corremos el riesgo que las uñas de gel se nos levanten en cuestión de días, tirando por la borda todo el trabajo que se ha hecho. Es más, decir que en el 90% de los casos las uñas de gel se levantan por no hacer correctamente este paso. En una próxima entrada os hablaré de los casos en los que las uñas se pueden levantar y qué hacer para que esto no ocurra.
Así que si os interesa saber más, continuad leyendo porque empezamos ya.
Para empezar a preparar la mano, lo primero que debemos hacer es sanitizar tanto nuestras manos
como la de la persona a la que le vamos a realizar la manicura exprés, así evitamos el llamado contagio cruzado. Si trabajas con guantes de látex, sólo sanitizar la de la clienta.
Una vez desinfectadas las manos, vamos a proceder a retirar con quitaesmalte el posible esmalte de uñas que lleve la clienta. Cogeremos el empujador de cutículas (yo siempre lo rocío con el desinfectante, todo y que, previamente ya lo he desinfectado con el germicida, no está nunca de más tomar nuestras medidas de higiene), y empujaremos con muuuchooo cuidado y sin hacer daño las cutículas hacia atrás e ir retirando el perigio (pielecita muerta de la cuticula) con la parte contraria de la herramienta. Si veis que las cutículas están muy pegadas podéis usar un ablandador de cutículas previamente, eso sí, aseguraros de una vez terminado limpiar bien las uñas con cleaner y una toallita de celulosa para que la uña no quede grasa.
Una vez empujadas y retiradas las cutículas (nunca cortar, salvo el caso que la clienta tenga un exceso de cutículas, como generalmente se ve en uñas mordidas), pasaremos a coger una lima de grano 180 y suavemente iremos limando la placa ungueal de forma vertical a la uña. Cuando digo "limaremos", no me refiero a ejercer fuerza, sinó a quitar el brillo de la uña, para abrir así los canales de adhesión. Hay que decir que muchas técnicas liman tanto que destrozan la uña y las dejan muy debilitadas, como he visto alguna vez, sobretodo en los salones de chinos. Pensad que la uña está compuesta por decenas de capas finas, y es muy fácil, si no se hace correctamente y con sumo cuidado, limar más de la cuenta. Además de destrozar la uña, duele muchísimo! Así que id con cuidado!.
Al acabar de quitar el brillo, cogeremos un cepillo y retiraremos el polvillo que ha quedado de limar. Cuando retireis dicho polvillo con el cepillo, hacedlo desde la cutícula hasta el borde libre de la uña, no hagáis movimientos de barrido de abajo hacia arriba, porque lo que estaréis haciendo es introducir ese polvillo en las cutículas. Llegados a esta parte sólo queda limar las uñas para darles forma e igualarlas. No limar mucho de los lados, no vayamos a crearle un uñero a nuestra clienta. Y terminamos el proceso, limpiando uña por uña con una toallita de celulosa empapada en cleaner.
A este proceso se le llama MANICURA EXPRÉS, y es el paso previo para realizar unas uñas de gel. Sólo decir que es importante no realizar una manicura tradicional el mismo día que ponemos uñas de gel, ya que lo que hacemos es hidratar las uñas y manos...aunque es obvio no está de más comentarlo.
Como una imagen vale más que mil palabras, aquí os dejo un vídeo con el paso a paso para realizar la preparación de la mano (manicura exprés)
Esta fase es crucial, ya que si no la realizamos correctamente corremos el riesgo que las uñas de gel se nos levanten en cuestión de días, tirando por la borda todo el trabajo que se ha hecho. Es más, decir que en el 90% de los casos las uñas de gel se levantan por no hacer correctamente este paso. En una próxima entrada os hablaré de los casos en los que las uñas se pueden levantar y qué hacer para que esto no ocurra.
Así que si os interesa saber más, continuad leyendo porque empezamos ya.
Para empezar a preparar la mano, lo primero que debemos hacer es sanitizar tanto nuestras manos
como la de la persona a la que le vamos a realizar la manicura exprés, así evitamos el llamado contagio cruzado. Si trabajas con guantes de látex, sólo sanitizar la de la clienta.
Una vez desinfectadas las manos, vamos a proceder a retirar con quitaesmalte el posible esmalte de uñas que lleve la clienta. Cogeremos el empujador de cutículas (yo siempre lo rocío con el desinfectante, todo y que, previamente ya lo he desinfectado con el germicida, no está nunca de más tomar nuestras medidas de higiene), y empujaremos con muuuchooo cuidado y sin hacer daño las cutículas hacia atrás e ir retirando el perigio (pielecita muerta de la cuticula) con la parte contraria de la herramienta. Si veis que las cutículas están muy pegadas podéis usar un ablandador de cutículas previamente, eso sí, aseguraros de una vez terminado limpiar bien las uñas con cleaner y una toallita de celulosa para que la uña no quede grasa.
Una vez empujadas y retiradas las cutículas (nunca cortar, salvo el caso que la clienta tenga un exceso de cutículas, como generalmente se ve en uñas mordidas), pasaremos a coger una lima de grano 180 y suavemente iremos limando la placa ungueal de forma vertical a la uña. Cuando digo "limaremos", no me refiero a ejercer fuerza, sinó a quitar el brillo de la uña, para abrir así los canales de adhesión. Hay que decir que muchas técnicas liman tanto que destrozan la uña y las dejan muy debilitadas, como he visto alguna vez, sobretodo en los salones de chinos. Pensad que la uña está compuesta por decenas de capas finas, y es muy fácil, si no se hace correctamente y con sumo cuidado, limar más de la cuenta. Además de destrozar la uña, duele muchísimo! Así que id con cuidado!.
Al acabar de quitar el brillo, cogeremos un cepillo y retiraremos el polvillo que ha quedado de limar. Cuando retireis dicho polvillo con el cepillo, hacedlo desde la cutícula hasta el borde libre de la uña, no hagáis movimientos de barrido de abajo hacia arriba, porque lo que estaréis haciendo es introducir ese polvillo en las cutículas. Llegados a esta parte sólo queda limar las uñas para darles forma e igualarlas. No limar mucho de los lados, no vayamos a crearle un uñero a nuestra clienta. Y terminamos el proceso, limpiando uña por uña con una toallita de celulosa empapada en cleaner.
A este proceso se le llama MANICURA EXPRÉS, y es el paso previo para realizar unas uñas de gel. Sólo decir que es importante no realizar una manicura tradicional el mismo día que ponemos uñas de gel, ya que lo que hacemos es hidratar las uñas y manos...aunque es obvio no está de más comentarlo.
Como una imagen vale más que mil palabras, aquí os dejo un vídeo con el paso a paso para realizar la preparación de la mano (manicura exprés)
Espero que esta entrada haya sido de vuestro interés y no olvidéis comentar y compartir, esto me es de gran ayuda para seguir compartiendo cositas con vosotras! Muchas gracias por leerme y hasta pronto! Chaooo!!
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